Un poder notarial le permite encargar a alguien la gestión de sus asuntos financieros si usted no puede hacerlo. Cubrirá todos los activos que no estén en su fideicomiso testamentario y suele permitir a sus apoderados ocuparse de otros asuntos cotidianos que usted pueda tener(por ejemplo, pagar facturas, hacer frente a fraudes con tarjetas de crédito, etc.).
Debe asegurarse de que el poder sea "duradero", es decir, que siga vigente aunque usted quede incapacitado (algunos formularios más antiguos tienen fecha de caducidad o expiran cuando usted queda incapacitado). Además, tendrá que decidir si su poder debe ser inmediato, es decir, que su agente pueda actuar en su nombre en el momento en que usted lo firme, o si debe ser renovable. Un poder resorte sólo entra en vigor cuando su apoderado recibe cartas de los médicos en las que se indica que usted es incapaz de gestionar sus finanzas.
Un documento de voluntades anticipadas le permite nombrar a alguien que se encargue de sus decisiones médicas y de las decisiones sobre la disposición de sus restos mortales. En un documento de voluntades anticipadas suele indicar si desea o no seguir con respiración asistida indefinidamente, o permitir a su agente que le retire la respiración si no va a mejorar. También le permitirá expresar sus deseos con respecto a la incineración o el entierro. A menudo también habrá un apartado sobre si desea o no ser donante de órganos.
Una autorización HIPAA le permite dar su consentimiento para que su agente sanitario pueda acceder a su historial médico en caso necesario.
Preparar una directiva de asistencia sanitaria no sólo evita un proceso de curatela (un proceso judicial para nombrar a un agente para una persona incapacitada), sino que puede hacer que un momento extremadamente difícil para su familia sea más fácil porque conocen y entienden sus deseos.
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